Condenamos los hechos del 30-S

Ángel Maza L.

El 30 de septiembre del 2010, nuestro país se encontró en una situación tan difícil, que puso en riesgo la estabilidad democrática y la seguridad interna.

En esta fecha, elementos de la Policía Nacional suspendieron sus labores en las calles y decidieron tomarse los cuarteles en señal de protesta por la aprobación de la Ley de Servicio Público el 29 de septiembre en la Asamblea Nacional. Algunos optaron por cerrar carreteras y quemar llantas, mientras que la escolta legislativa se tomó las instalaciones de la Asamblea para no permitir su funcionamiento. A la acción policial se sumó un grupo de la Fuerza Aérea que se tomó el Aeropuerto Mariscal Sucre. Pero la supuesta protesta fue más allá…, se conspiró por el poder.

Las consecuencias fueron desastrosas para el país, desde pérdidas millonarias, saqueos, intoxicados, heridos y personas fallecidas. Algunos efectivos de la institución responsable de brindar seguridad a los ciudadanos, decidieron tomar las armas del propio pueblo, para atacar a quienes debían proteger y les habían confiado las insignias. Nuestro compañero Eduardo Chamba, Vicepresidente Nacional de CORAJE, recibió en Quito por parte de un policía, un disparo de perdigones y hasta ahora tiene 9 de ellos en su cuerpo.

En consecuencia, condenamos los hechos del 30-S y comprometemos nuestro contingente para enfrentar cualquier atentado contra la constitución y la vida misma de los ecuatorianos. Para que estos hechos no se repitan en la historia nacional, es preciso avanzar en la depuración de la fuerza pública, como también es imprescindible profundizar la democracia, donde todos los sectores sociales del país puedan ser escuchados y valorados.

Creemos en la movilización social como el irrenunciable derecho a la resistencia, pero rechazamos los golpes fraguados por el poder económico e imperial; nos unimos al pueblo ecuatoriano en sus luchas por días mejores y repudiamos los intentos de la partidocracia en seguir saqueando el país.

¡Nunca más al enfrentamiento armado en contra del pueblo!

¡Viva el Ecuador soberano, viva el pueblo ecuatoriano!